Las medicinas o medicamentos deben ser prescritas por el
profesional de la medicina por lo que nadie debe auto medicarse.
Cuando un paciente acude al médico generalmente este le
examina para diagnosticar la patología presentada, luego escribe sobre una
receta o récipe el nombre el medicamento, la presentación, las instrucciones de
ingesta del mismo y la duración, además de la identificación del paciente, la
localidad y la fecha, lo firma y coloca los sellos correspondientes.
Generalmente se utiliza una plantilla o formato impreso sobre
papel de color blanco, con algunos de los campos específicos antes mencionados.
Para las sustancias controladas o estupefacientes y psicotrópicas
se utiliza por ley un récipe de color morado o con franja de color morado y la
envoltura del medicamento también tiene franjas moradas.
Este tipo de medicamentos usualmente alucinógenos son
controlados por las autoridades y los expendios, depósitos, distribuidores o transportistas
de los mismos deben cumplir cabalmente las regulaciones para evitar desvíos de
estos.
Está total y expresamente prohibido la venta o suministro de
medicamentos controlados sin el récipe morado el cual se lo debe quedar el
expendedor como prueba de la transacción contra el inventario.