Los títulos son un elemento clave en cualquier texto, ya que indican la información principal de un tema expositivo. Son precisos en cuanto a qué información se va a desarrollar. Pero, ¿qué pasa con esos títulos que no son el principal pero que también nos ayudan a entender y dividir el contenido? Se les llama subtítulos.
Para ponerlo en términos sencillos, un subtítulo es una especie de título secundario que se utiliza para dividir el contenido en secciones más pequeñas y manejables. Los subtítulos son particularmente útiles en textos largos, ya que ayudan a los lectores a navegar a través del contenido y a entender mejor de qué se trata cada sección. Así, si un título es como el nombre de un libro, los subtítulos serían los nombres de los capítulos dentro de ese libro.
En términos de marketing digital y SEO, los subtítulos son igualmente importantes. En este contexto, los subtítulos suelen ser etiquetas H2, H3, etc., mientras que el título principal de la página es una etiqueta H1. Los motores de búsqueda como Google utilizan estos subtítulos para entender mejor el contenido de la página y para determinar su relevancia para ciertas consultas de búsqueda. Así que no sólo los subtítulos mejoran la legibilidad de un texto, sino que también pueden ayudar a mejorar su clasificación en los resultados de búsqueda.
- Subtítulos en textos: Ayudan a dividir el contenido y facilitan la lectura.
- Subtítulos en SEO: Ayudan a los motores de búsqueda a entender y clasificar mejor el contenido de la página.
En resumen, la respuesta a la pregunta "¿Cómo se le llama al título secundario?" es sencilla: se le llama subtítulo. Pero es importante recordar que los subtítulos son mucho más que simplemente títulos secundarios: son herramientas esenciales para mejorar la legibilidad de un texto y para optimizar el contenido para los motores de búsqueda.